«Cuando un desconocido me atacó, Daemon usó sus poderes para salvarme y después me confesó que no es de nuestro planeta» 

Díganme si después de leer eso no se quedan enganchados casi al instante… pues como buena fan del genero paranormal y ciencia ficción, basicamente eso fue lo que pasó a mi. 

Cuando leí la sinopsis de Obsidian por primera vez me emocioné totalmente porque me dije a mi misma, OH MI DIOS HE LEIDO ESTE LIBRO ANTES, y efectivamente lo había hecho, pero fue la cosa más rara del mundo.

Como muchos saben soy Wattpader desde hace un tiempo, leo y escribo en la plataforma desde hace poco más de cinco años y entre tantas cosas que le leído recuerdo haber caído en un fanfic de Harry Styles con el mismo nombre.

Por supuesto me encantó la idea de un Harry Styles alienígena, no voy a mentir, no tenía idea alguna de que en realidad era una novela y que para colmo no era auto conclusiva sino una saga de seis libros y una precuela.

Cuando leí la versión de Harry Styles, amé la historia completamente, incluso recuerdo haber escrito un par de comentarios sobre lo bien que estaba escrita (yo bien inocente cayendo en la trampa), hasta que me enteré de la verdad y por poco me da algo. Corrí a la librería a conseguir el verdadero Obsidian y bueno, Daemon Black es la perfección andante solo que mucho más brillante.

La novela es narrada por Katy, una chica de Florida que se ve forzada a mudarse a Virginia Occidental junto a su madre, tras la muerte de su padre. Es bloguera literaria (lo mejor de todo) y bastante metida en sus libros los cuales considera su vida.

Su nueva casa se encuentra en un pueblo básicamente muerto, en donde lo más divertido que puede pasar es una fiesta en medio de un matorral, pero todo cambia cuando toca la puerta de sus vecinos y es recibida por Daemon, un chico de su edad que ella misma describe como alto, guapo, con unos ojos verdes impresionantes, pero también insufrible, arrogante y malcriado.

Son como el agua y el aceite desde el principio, pero Dee, la hermana gemela de Daemon, y Katy comienzan una amistad increíble casi al instante, eso sí, siempre guardando secretos y es que como no lo harían siendo alienígenas increíblemente poderosos.

Todo cambia cuando Daemon y Katy se encuentran una noche en el bosque y, gracias a una pelea entre los dos, ella se escapa de él corriendo hacia la carretera siendo casi atropellada por un camión enorme que, sin siquiera tocar, Daemon detiene, salvándole la vida a Katy, y en consecuencia dejándole un rastro de luz que puede ser visto a kilómetros de distancia, haciendo que se convierta en una especia de faro para los Arum, los enemigos naturales de los Luxen, la raza de la que Daemon y Dee son parte.

Ahora, Katy conoce su secreto y eso no parece gustarle en lo absoluto a los otros Luxen del pueblo, sin mencionar las historias que el resto de humanos cuentan sobre la familia Black y el trágico accidente del trillizo faltante, Dawson, y su novia Bethany quienes ante el ojo de todos, han desaparecido, pero aparentemente fueron asesinados por estos seres malignos.

Aparte de todo el mal panorama, Katy está enganchadísima con Daemon, y es que este después de salvarla repetidas veces, no entiende como hace Katy para seguir ahí sin espantarse.

Es necesario que sepan que este primer libro es como una introducción a la saga, si bien parece no tener mucha acción, lo realmente increíble comienza a suceder en los últimos capítulos, cuando conocemos la atracción sin igual de ambos personajes, y por supuesto el misterioso poder que Katy tiene y que al parecer nadie entiende. Tras curarla con su luz, Daemon y Katy ahora parecen estar conectados el uno al otro y eso es algo que ninguno de los dos comprende y que prefieren mantener entre ellos.

En dos capítulos pasan más cosas que en 28, así que estén preparados para una lectura ligera sin mucho más allá de lo normal de una novela juvenil. Si bien se van revelando secretos a lo largo de la historia la verdadera acción está al final, así que pronto vendré con la reseña del segundo libro para ver qué más ocurre entre Daemon y Katy.

8/10